¿Cuándo comenzó todo?
por Carla
¿Cuándo comenzó todo esto?
Ni siquiera diría una fecha exacta. Solo sé que el tiempo me ha ido descomponiendo en pequeños fragmentos, y su corazón ha sido devorado por el ego y la lujuria.
Tira la primera piedra aquel que no haya cometido acto impuro, decía.
Yo soy la que lo lanzaría y lo desordenaría completamente. Deshilacharía toda su existencia, toda su lógica retorcida para crear este mundo tan acomplejado y sintético.
¿Sus creaciones a imagen y semejanza?
Sus pequeñas bestias ansiosas de carne y dolor.
Eso son los hombres; seres egoístas deseosos del calor y la insensatez. Para mí no son más que alimento. Un delicioso manjar, semejante a la jalea real.
Yo nací de ti. Tú me creaste. Pero en realidad fuimos engendrados a la par. Como dos caras de la misma moneda. Nacidos del egocentrismo del ser humano, de su necesidad por tenernos para él solo. Qué denigrante y vergonzoso.
Tenemos que ser reyes, ofrecerles todo lo que nos forma. Nuestro ser y esencia. A cambio de nada. Para luego acabar con nosotros de una manera tortuosa y desagradable.
Solo somos forma sin acabar. Tú decidiste acatar su compasión y grandeza. Pero yo no.
Yo quería más. Soñaba con el aire y la libertad. Lo que ellos decían que les pertenecía. Ilusión vana y humana de la imaginación.
Me odiaste. Me separaste de tu agarre. Me repudiaste por no querer amarlos.
Aunque yo era el padre, despechaba a mis propios vástagos. Vástagos de los que había nacido. A ti te otorgaron la esperanza, el amor, la honestidad.
Dones inútiles e intransigentes. Que desperdicio.
Pero cuando supieron de mi persona, creyeron en el miedo, el dolor, la muerte. Supieron que no eran dioses, solo parte de algo insignificante. Patéticos, débiles y con tendencias suicidas.
Eso es lo que son: seres que buscan su propia extinción. La autodestrucción.
Desesperación. Dolor. Agonía. Infierno.
Ellos son… el demonio en persona. Vestidos de luto para nosotros.
Y yo… soy su muerte.
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