C05D02 Sopa de letras y bases de la persona

Segundo día de la sesión. Nuevos integrantes (o retornados, según el espacio de tiempo que tengamos de referencia) que pasan por el momento ficha-presentación (rápidamente) y ya vamos al lío, que hoy tenemos que dibujar y escribir.

1. Sopa de letras

Misión: explorar nuevos mundos… no, que eso es de otra cosa. Bien, con la sopa de letras mostrada en la imagen superior, tenemos la misión de encontrar el máximo número de palabras posibles, vale de izquierda a derecha así como de derecha a izquierda, vale que unas letras sirvan para dos palabras (como oído/odio), valen diagonales, verticales y horizontales… el mínimo de letras por palabra, eso sí, lo pusimos en 2. ¿Y ya está? No, qué va.

Tocó ponerse las pilas e intentar crear algo usando todas las palabras encontradas, se recomendó que no fuera un cuento (a veces lo más fácil), así que salieron poemas, reflexiones… ¡¡hasta chistes!! Compartimos los resultados entre todas y todos (y aquí les dejamos unas muestras de los mismos).

2. La personita I

Vamos con el dibujo, que para algo (no) nos pagan. Lo primero, unos consejos para dibujar: olvídense de estar borrando cada cinco segundos, repitan la línea cuantas veces quieran, que para algo es un boceto; no calquen tanto el lápiz; mejor si no usan portaminas (lapiceras que las llaman en Valladolid) por ahora, en general marcan mucho (sobre todo las de 0,5); un 2b es genial para esto; el folio blanco, por favor, las hojas a cuadro o rayadas… para otras cosas.

Antes siquiera de empezar con las personitas, realizamos algunos ejercicios para soltar la muñeca (líneas horizontales, verticales, diagonales, círculos; tanto en una dirección como en otra; también degradados con el lápiz), en parte los hicimos para que se dieran cuenta que ni todos dibujamos las líneas igual ni ponemos el papel en la misma posición: es importante que todas y todos conozcan cómo están más cómodas o cómodos para dibujar con más soltura.

Esta vez hemos preferido no comenzar con el canon (las ocho cabezas y todo eso), que lo veremos más adelante. Empezamos con lo que sabemos: monigotes de palitos. Pero tampoco vale todo cuando dibujamos palitos, hay que darles un poco de movimiento. Así que fuimos, poco a poco, volviendo más complejo nuestro monigote (la figura de arriba) hasta conseguir uno que pudiéramos mover con más soltura (el último de las figuras de arriba). El ejercicio terminó mandando a dibujar muchos monigotes en todo tipo de posturas.